Me gustan los paraguas. La cosa es simple: no te molestan, te protegen, no te fallan y no tienen malas ideas, No se porque pienso en cuestiones como esa considerando las circunstancias: voy en un vehículo junto a mis colegas cómplices a ciento diez kilómetros por hora quemando asfalto de la noche y huyendo de la policía